Es angustioso y desesperanzador lo poco que se puede lograr y convencer a la gente racional que nos ubicamos en el camino de la política local, regional y nacional, ver y entender los espantajos de propuestas políticas de un lado y de otro; que únicamente comprometen a personas que buscan y logran enriquecerse de formas abrumadora de las arcas del patrimonio publico en todo nivel.
Estamos en manos de intereses que van mas allá de lo normal, cuyo “dios” es el afán de lucro y el país que requiere de ecuanimidad, valentía y entrega se dirige al fondo de la cañería putrefacta de la ambición, de personas y grupos oligarcas y castristas que han concebido el poder para proyectos que no son afines con la paz, el éxito, el bienestar personal y familiar del venezolano. Esto es lo que únicamente podemos observar los que con inteligencia determinamos y concatenamos las variables subyacentes en lo sucesos que en la región y el país ocurren.
Las posibilidades de salir del barranco, están ligadas a la sociedad que logre organizarse en base a los valores de la libertad, la democracia y la honestidad, como ejes de vida que tiene cualquier país con clara visión de y a donde se dirigirse. La falta de experiencias de nuestros países latinoamericanas, donde guerras, hambre y pestilencia no ha llegado, nos muestra con sencillez la falta de saber utilizar los PRINCIPIOS para superar las crisis políticas.
Es por ello que la represtación de europeos en nuestras tierras nos permite gozar de modelos genuinos de construir un país, donde el trabajo honesto, la inversión estratégica y la importancia de una exitosa formación han sido los pilares de grandes fortunas honestas en nuestras tierras. Bravo por estos italianos, españoles, portugueses, alemanes, norteamericanos entre muchos otros.
Ser socialdemócrata, es hoy en día uno de los mayores galardones que podemos ostentar, nuestros corazones no se rinden ante la posibilidad de la esperanza que del pueblo emerjan lideres que logran vencer la sutil seducción del dinero fácil, por ver a un pueblo exitozo a nivel personal, familiar, tanto como gente como en lo económico. Esta, es la responsabilidad básica de un Estado Social y un Municipio regido con estos paradigmas de vida.
Las posibilidades están en ti estimado lector, en nuestro autocompromiso de generar un municipio, una región y un país que se enorgullezca de sus valores y factores de movilización social dependientes de un bienestar que parte de lo local y se eleve como espuma a los niveles de la totalidad del país. Organización, participación y desprendimiento son el pilar de las posibilidades de una oposición de lo pasado y presente.
La reciprocidad, las lealtades comunes a los conceptos y luchas, la identidad ideológica y otro variables de convivencia y lucha social, aparentemente se doblan por la deformada forma de hacer y vivir la política actual. La imposición de leyes enfermas y deformadas en el marco de la democracia y la Constitución, el dinero, los contratos, el pago de servicios, la aprobación de permisos, entre otras, adornan las formas del régimen y de algunos sectores de oposición en la vida del país de hoy.
Las posibilidades de una oposición, para nuestra nación no es lo presente ni las formas del pasado, son las iniciativas y voluntades basadas en los principios referenciales que permitan al país salir de lo que hay, enrubiando el destino personal, familiar y social hacia destinos de bienestar que partan de posibilidades políticas, que abarquen las diferencia originadas en el cúmulo de aptitudes individuales que le proporcionen a la sociedad las diferencias naturales y necesarias.
Jose Ernesto Pons B.
Venezuela, 04 12 2007
Reacciona es tiempo de actuar